Este texto fue publicado en el 2002, en el suplemento feminista La Cuerda. He aquí el respectivo link:
http://www.paginadigital.com.ar/ARTICULOS/2002rest/quint/varios/cuerdb14-6.html#lapaseante2
El vocabulario aterciopelado de los movimientos, los movimientos en la sustancia navegable del sonido, el sonido que todo lo cubre y lo devela. Bailar ha estado siempre de moda, no diremos lo contrario, ¿pero bailar así...? Lenta, es cierto, la cosa, y quizá en fiestas todavía estrechas si comparadas con la magnitud global del movimiento, pero la música electrónica acá promete un calendario continuo, muchas citas y sagas nocturnas, un público.
Quizá el colectivo 502 es el promotor más afinado en Guatemala de fiestas, djs y cultura electrónica. En una fiesta cualquiera, hay que ver lo puede hacer un set de discos bien escogidos y eslabonados. Vean por ustedes mismos... los glowsticks trazan picassos espontáneos y fluorescentes en el aire, los cuerpos libres hoy, gregarios y a la vez individuales, reparten su energía, los giros persuasivos de las bocinas suben de tono hasta el escalofrío.
Ahora mismo está poniendo la música dj baby g, la primera dj local. Ella asegura que no le gustaría que la oigan por ser una mujer que mezcla viniles en Guatemala –como si eso fuera una rareza imposible– sino por ser a secas una buena dj. A su modo de ver las cosas, el secreto de mezclar está en "la constancia, la dedicación, el ensayo continuo, tener alma hacia la música".
"Yo espero que la gente se vaya metiendo más en el rollo", anhela, a la vez que distingue: "Yo he estando viniendo a las fiestas desde antes y la cosa ha subido mucho, la gente está apreciando más la música por lo que es, y la gente viene a ver los djs y qué bueno: es como ir a un concierto, sólo que vas a ver al dj en lugar de ver a alguien tocar."
María Fernanda López Bermúdez, colombiana, es una pieza importante dentro de 502. Su papel en la promoción de las fiestas hace de ella un testigo esencial de las mismas: "La gente está entendiendo de qué se trata". Sin embargo, asegura, le gustaría la presencia de más mujeres. "Tienen que ser más activas; el porcentaje de hombres en las fiestas es mucho mayor que el de las mujeres". Razona una explicación: "Los hombres salen solos pero las mujeres no. Muchas chavas si no las saca un hombre se quedan en su casa. ¡Así no es, chavas! Si queremos divertirnos nos vamos a divertir con o sin hombres".
Por allí nos topamos con Sandra Patricia Nichols, frecuentadora de las fiestas. "Se trata de sentirte libre: podés venir como querrás, simplemente sos tú". Como mujer, dice sentirse cómoda en estos eventos: "La mayoría de las personas que vienen tienen una mente abierta, no tenés por qué estar reprimiéndote de absolutamente nada." Y agrega: "Siento que sí, que esto está creciendo; todo el mundo está poniéndose al tanto de las cosas..."
En la pista, todas y todos bailan. Esta felicidad, esta forma de no contaminarse por el tedio, se extenderá cada vez con más fuerza en Guatemala.
http://www.paginadigital.com.ar/ARTICULOS/2002rest/quint/varios/cuerdb14-6.html#lapaseante2
El vocabulario aterciopelado de los movimientos, los movimientos en la sustancia navegable del sonido, el sonido que todo lo cubre y lo devela. Bailar ha estado siempre de moda, no diremos lo contrario, ¿pero bailar así...? Lenta, es cierto, la cosa, y quizá en fiestas todavía estrechas si comparadas con la magnitud global del movimiento, pero la música electrónica acá promete un calendario continuo, muchas citas y sagas nocturnas, un público.
Quizá el colectivo 502 es el promotor más afinado en Guatemala de fiestas, djs y cultura electrónica. En una fiesta cualquiera, hay que ver lo puede hacer un set de discos bien escogidos y eslabonados. Vean por ustedes mismos... los glowsticks trazan picassos espontáneos y fluorescentes en el aire, los cuerpos libres hoy, gregarios y a la vez individuales, reparten su energía, los giros persuasivos de las bocinas suben de tono hasta el escalofrío.
Ahora mismo está poniendo la música dj baby g, la primera dj local. Ella asegura que no le gustaría que la oigan por ser una mujer que mezcla viniles en Guatemala –como si eso fuera una rareza imposible– sino por ser a secas una buena dj. A su modo de ver las cosas, el secreto de mezclar está en "la constancia, la dedicación, el ensayo continuo, tener alma hacia la música".
"Yo espero que la gente se vaya metiendo más en el rollo", anhela, a la vez que distingue: "Yo he estando viniendo a las fiestas desde antes y la cosa ha subido mucho, la gente está apreciando más la música por lo que es, y la gente viene a ver los djs y qué bueno: es como ir a un concierto, sólo que vas a ver al dj en lugar de ver a alguien tocar."
María Fernanda López Bermúdez, colombiana, es una pieza importante dentro de 502. Su papel en la promoción de las fiestas hace de ella un testigo esencial de las mismas: "La gente está entendiendo de qué se trata". Sin embargo, asegura, le gustaría la presencia de más mujeres. "Tienen que ser más activas; el porcentaje de hombres en las fiestas es mucho mayor que el de las mujeres". Razona una explicación: "Los hombres salen solos pero las mujeres no. Muchas chavas si no las saca un hombre se quedan en su casa. ¡Así no es, chavas! Si queremos divertirnos nos vamos a divertir con o sin hombres".
Por allí nos topamos con Sandra Patricia Nichols, frecuentadora de las fiestas. "Se trata de sentirte libre: podés venir como querrás, simplemente sos tú". Como mujer, dice sentirse cómoda en estos eventos: "La mayoría de las personas que vienen tienen una mente abierta, no tenés por qué estar reprimiéndote de absolutamente nada." Y agrega: "Siento que sí, que esto está creciendo; todo el mundo está poniéndose al tanto de las cosas..."
En la pista, todas y todos bailan. Esta felicidad, esta forma de no contaminarse por el tedio, se extenderá cada vez con más fuerza en Guatemala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario